Esta tradición fue establecida por la Alianza Cooperativa Internacional (ACI) en 1923 y ha sido una fecha importante para el movimiento cooperativo mundial. En 2024, la conmemoración tendrá lugar el 6 de julio, marcando la 102ª edición de este día significativo.
El Día Internacional de las Cooperativas se celebra anualmente el primer sábado de julio. La celebración no solo reconoce la contribución de las cooperativas al desarrollo sostenible y al bienestar económico y social de sus comunidades, sino que también pone el foco en su papel en la promoción de la igualdad y la justicia social. Las cooperativas, basadas en principios de participación democrática y equidad, son un modelo empresarial único que busca el progreso colectivo y la distribución justa de los recursos.
La Alianza Cooperativa Internacional es el organismo que reúne a 310 organizaciones de 107 países que representan a casi 1.000 millones de personas de todo el mundo.
Desde el año 2017 es presidida por Ariel Guarco, un destacado dirigente cooperativista argentino egresado de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UNICEN. Su liderazgo se ha centrado en promover la identidad cooperativa y aumentar la influencia del cooperativismo en los organismos internacionales.
En nuestro país, el movimiento cooperativo representa una parte significativa de la economía, contribuyendo con alrededor del 10% del Producto Bruto Interno (PBI). Este porcentaje refleja no solo la actividad económica directa de las cooperativas sino también su impacto en la generación de empleo y en el desarrollo social.
En la provincia de Buenos Aires, el sector cooperativo es particularmente robusto, con una presencia notable en la producción y mayormente en la prestación de servicios públicos esenciales como internet, agua y electricidad. Las cooperativas de nuestra región no solo sostienen a las comunidades locales sino que también son un motor clave para el equilibrio entre el mundo rural y urbano, demostrando la capacidad del cooperativismo para fomentar una economía más inclusiva y sostenible.
La Facultad de Ciencias Exactas tiene un extenso recorrido en el trabajo articulado con el movimiento cooperativo local.
En el año 2016 se originó en Exactas el “Consuma Dignidad”, un proyecto de comercialización sin fines de lucro que nuclea a productores locales y que con el tiempo se transformó en una cooperativa de consumo. En el marco de este proyecto, se acompañó a la Universidad Nacional de Quilmes en el desarrollo de la plataforma de comercio electrónico “Chasqui”, que hoy es utilizada por más de 70 puntos de comercialización de todo el país.
La Cátedra de Cooperativismo, que ya va por su novena edición, es una materia optativa de la carrera de Ingeniería en Sistemas y pronto se reconocerá también como Actividad de Libre Elección.
Desde hace casi una década surgieron también dos cooperativas de desarrollo de software integradas por estudiantes y graduados de la facultad: Geneos y COODESOFT que adoptaron el modelo de cooperativismo y software libre para ofrecer soluciones informáticas.
Estas cooperativas son ejemplos de cómo el modelo cooperativo puede ser aplicado exitosamente en el sector tecnológico, ofreciendo alternativas a las estructuras tradicionales de las empresas de software. Ambas empresas están asociadas a FACTTIC, la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajo de Tecnología, Innovación y Conocimiento, entidad de segundo grado que agrupa a las cooperativas del sector.
Además, estas cooperativas forman parte de un movimiento más amplio que incluye otras entidades como la Coopraee – Cooperativa para la Revalorización de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (surgida a partir de la experiencia del proyecto de extensión de la facultad REHTO) y que pronto tendrá su espacio en el área industrial de la ciudad.
Las cooperativas GENEOS, COODESOFT, y COOPRAEE participan también de la Cátedra de Cooperativismo, recibiendo la visita de estudiantes para compartirles su experiencia. Además son parte de entramados locales como la Mesa sectorial del COPRET, la Feria IT y participan cada año de la organización del FLISOL.
El rol de las cooperativas ofreciendo prácticas profesionalizantes
Juan Ignacio Chiozza Logroño, es estudiante de Ingeniería en Sistemas en la Facultad de Ciencias Exactas. Durante el año 2023 realizó sus prácticas profesionales (PPS) en la cooperativa Geneos, y finalizada la misma se integró como asociado.
Al respecto, Juan Ignacio mencionó que conocía del modelo cooperativo y se interesó por el fuerte componente sociocomunitario que tenía el proyecto ofrecido para realizar sus prácticas.
Consultado por las razones que lo llevaron a asociarse a la cooperativa, Juan Ignacio responde “lo que más me gustó fue el ambiente de trabajo. Desde el primer día en que comencé las PPS, me encontré con un grupo de personas que me hicieron sentir parte del equipo. Para mí, esto tiene un valor muy grande: la calidez humana, el compañerismo y el buen clima laboral fueron factores muy importantes a la hora de decidirme por ser asociado.”
Todo esto demuestra que el modelo cooperativo es una forma de organización que prioriza la participación activa y la igualdad entre sus asociados, lo que las hace más democráticas que otras estructuras empresariales, contribuyendo además, a la soberanía tecnológica y al desarrollo del país.
A modo de cierre, nada mejor que retomar el lema elegido por la ACI para el Año Internacional de las Cooperativas de la ONU “Las cooperativas construyen un mundo mejor”.
